En el último siglo, el planeta tierra ha sido un torturado testigo del desarrollo tecnológico del hombre. Un desarrollo que ha significado muerte y destrucción masiva al planeta que llamamos hogar.

Cabe mencionar que esta inteligencia nos ha hecho la mejor y la peor especie que ha habitado este hogar. Me refiero a la mejor, porque hemos aprovecha y usado el ambiente para nuestro beneficio más que otras especies, y a lo peor, porque en ese uso desmesurado e irresponsable hemos destruido en un siglo, lo que un ecosistema tardó en formar en miles de años.

Es irónico observar como cada descubrimiento que beneficia al hombre y hace que avance otras 100 años en el conocimiento en apenas 1 hora, de por resultado la destrucción de miles de años de trabajo realizado por la naturaleza en tan solo unos años; refiéreme con ello a los grandes desastres que han atormentado la naturaleza.
La contaminación con plaguicidas, los derrames de petróleo en el mar, los peligros de la radiación nuclear y los incendios forestales amenazan a los ecosistemas de la Tierra. Es esencial para la defensa de la vida en el planeta que se difundan y analicen los errores que han llevado a situaciones de grave daño ecológico.
*Los derrames de petróleo.
*Los escapes nucleares.
*Incendios forestales.
*Los escapes nucleares.
*Incendios forestales.
La tecnología debe ser ambiental
Esta debe cuidar al hombre y a la naturaleza no solo aprovechando al máximo sus recursos materiales y energéticos, si no ambientales, haciéndose parte de un desarrollo sustentable que pueda mantener o mejorar la naturaleza, no creando mutantes ni jugando con ella, si no fortaleciéndola, y restaurando el equilibrio entre las especies.



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